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Algunas personas pensamos que ese primer día en todas las situaciones determina en su totalidad nuestra relación con las personas en cualquier ambito social, sobre todo lo llegamos a sentir cuando somos pequeños, tal vez hasta los trabajos se mueven algunas cosas, ya que se vuelve como una racha cada vez que sale algo nuevo en nuestra vida profesional. De hecho puedo comentarles que mi experiencia fue un poco complicada al momento de ingresar a las escuelas porque en ese entonces yo no sabía nada sobre la seguridad, ser tú mismo, entre otras cosas que ya de grande son importantes. Lo que me ponía nervioso era el hecho de que me aceptaran, poder ser "supercool" y eso al final es un gran error; los compañeros se fijan en otras cosas que con el tiempo se van haciendo a la idea de que eres alguien buena onda pero no toda la gente tenemos la capacidad de hacer amigos tan fácil y en un solo día entablar una buena comunicación, entonces no hay que juzgarlos ni verlos como bichos raros, lo que decimos es como reflejamos la persona que somos y he de confesar que la mosquita muerta es más viva que nada y el más latoso suele ser el inteligente de la clase.

Eso suele pasar con personas que no se han sentido seguras, son algo tímidas o de plano no saben entablar una conversación aunque se les caiga el lápiz, te pidan la regla o comparta sus papas del lunch y no hay que olvidar a esas personas que tienen capacidades especiales que también se quieren abrir al mundo. Aunque hay muchas verdades y mitos de cómo son las situaciones en ese primer día, nuestras capacidades dicen que nos salvamos y al regresar a casa sentimos un alivio de mañana será otro día, obvio cada uno tiene su historia, lo complicado no es el hecho de llegar sino de decir tengo todo para ser fuerte, el chiste es cuando ya sientes que paso lo malo y te fijas con quien te vas a llevar bien.

Creo que casi siempre ha sido un pequeño problema hablar y aceptar lo que pasa por nuestra cabeza cuando realizamos un paso importante por eso hay que ir con una actitud positiva, sonreír y tratar de comprender que la escuela es para ir a estudiar, los amigos se van a dar con el tiempo y la convivencia con una mente abierta, no te preocupes si el primer día no conquistaste a alguien o le hablaste más a un maestro que a cualquier otro compañero, eres así hasta que la gente te vaya conociendo, debemos tener claro, que esperamos mucho de aquel primer día, recordemos que es completamente normal transitar por un periodo de adaptación. Los primeros días no podemos pretender realizar todas las asignaciones a la perfección, hay que tomar un tiempo para entender cómo funciona todo y más en nuestra conducta, aclarar todas las dudas, aprender la filosofía que maneja el trabajo, las actividades y lo demás. En una empresa no valoran solo los conocimientos de sus empleados, también valorar la actitud que tengan, por estos motivos, se debe estar atento, ser resolutivo y proactivo al instante de asumir las responsabilidad de todo lo que se  haga, así que sólo tomalo normal, respira y que fluyan las cosas.