Si en verdad supieras lo que dicen de ti en tu ausencia,
seguro, seguro, dejarías de preocuparte tanto por tratar de caerles bien.
A mi no me molesta que la gente hable mal de mí
porque normalmente los perros, si te fijas, ladran cuando no conocen a la gente.
Pues lo mismo; las personas van a lastimarte y después actuarán como si tú los hubieras lastimado a ellos.
la gente más peligrosa no son las personas que te hacen daño de frente,
sino aquellas que envenenan a otras para que lo hagan.
Muchas veces son tus propios "amigos"
quienes mantienen informados a tus enemigos sobre tu vida.
Cuídate de los lobos con disfraz de oveja.
Cuando alguien habla a tus espaldas,
si te fijas bien, esa persona está en el lugar correcto,
es decir, detrás de ti.
A veces somos buenas personas con la gente equivocada.
Por eso, yo soy de pocos amigos porque no me gusta coleccionar hipócritas.