LOS FANTASMAS DE DAVOS

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En un planeta muy lejano llamado Davos, existía una guerra ancestral entre Los Davoenses y los fantasmas de una región; nadie, ni los más viejos, podían recordar cómo había empezado está guerra, sólo sabían que había durado demasiado tiempo y su costo era excesivo para ambos bandos, la situación era tan terrible que estaba a punto de llevar a los fantasmas a tomar medidas extremas, una tarde el fantasma más joven y valiente de todos llamado Elios, entro a la habitación su líder el fantasma más viejo y sabio de todos Edmund.

-Señor la situación está empeorando a otro grupo más de fantasmas no regreso de su ronda nocturna, tememos lo peor, Los Davoenses los han capturado, no podemos continuar así, ellos han encontrado la forma de evaporarnos, de lograr que dejemos de existir, nos odian y su odio crece más cada día, antes nos cazaban por deporte y nos mantenían encerrados o nos congelaban y nos mantenían como trofeos, pero ya no se conforman con eso, han decidido simplemente exterminarnos, hace mucho tiempo nos tenían miedo y se mantenían lejos de nosotros y nosotros de ellos, pero con el tiempo ese miedo se volvió enojo el enojo en furia y esa furia en odio debemos tomar medidas extremas.

-Tienes razón Elios, reúne al consejo llego el momento de tomar decisiones difíciles.

Esa misma tarde el consejo conformado por los fantasmas más sabios de todos se reunió en el salón principal, para tomar una decisión, con gran tristeza Edmund se dirigió a todos.

-Señores hemos llegado al punto sin retorno no podemos continuar así, de buena fuente he escuchado que en una galaxia muy lejana existe un planeta llamado tierra que es habitada por extraños seres llamados humanos, también escuche que sus crías llamados niños se asustan con mucha facilidad, yo propongo que emigremos a ese planeta, nosotros los fantasmas no necesitamos respirar lo cual hace que nuestro viaje no tenga ninguna dificultad, con gusto escuchare si alguien más tiene otra propuesta, si no es así, espero voten a favor de la mí, los escucho.

Por lo que pareció una eternidad el salón completo guardo silencio hasta que finalmente se escuchó el grito de uno de los fantasmas.

-Si larguémonos de este mugroso planeta, empecemos de nuevo.

- Si estoy ansioso por conocer a esos niños.

Agrego otro más, y así uno a uno los fantasmas apoyaron la decisión de Edmund, hasta que todo el salón apoyo su idea, finalmente agrego.

No se diga más, mañana a primera hora iniciaremos el viaje

Y así lo hicieron, ni uno solo miro hacia atrás.

PRIMER FINAL

Después de un largo camino los fantasmas al fin llegaron a

la tierra, al hacerlo se dispersaron por todo el mundo, no sin antes

acordar un punto de encuentro por si alguno de ellos, llegaba a

tener un problema, no habían pasado ni doce horas, cuando los

fantasmas empezaron a llegar al punto en cuestión.

El primer fantasma dijo con gran temor en la voz.

-ni hablar este es el peor lugar donde he estado, hay guerras y

balaceras por todas partes, los terrestres ni tiempo tienen de

asustarse con nosotros, están más preocupados por llegar vivos al

final del día.

Un segundo fantasma con lágrimas en los ojos dijo.

-la violencia es terrible, pero lo peor es la inseguridad, yo traigo

esta bolsa de plástico, porque me robaron mi sabana y ni cuenta

me di de donde fue.

Un tercer fantasma grito muy asustado.

-eso no es nada a mí me querían arrestar, porque según ellos había

entrado ilegalmente al país y no tenía papeles ¡¡papeles!! ¿desde

cuándo un fantasma necesita papeles?

Finalmente, el fantasma más viejo dijo firmemente

-quien vota por regresar a nuestro planeta natal donde

definitivamente no asustaremos, pero estaremos más seguros.

Todos sin excepción votaron por regresar.

SEGUNDO FINAL

Los fantasmas viajaron durante muchos años, ellos no esperaban

que fueran tantos ni que la tierra estuviera tan lejos, la mayoría de

ellos se fueron quedando en los diferentes caminos que fueron

encontrando a su paso, solo un puñado de ellos logro llegar a la

tierra, pero al llegar a ella lo que encontraron fue un planeta

completamente muerto, kilómetros y kilómetros de arena de vez

en cuando llegaban a encontrar restos de lo que alguna vez fueron

grandes ciudades, pero el panorama era tan triste y desolador que

ni siquiera pudieron encontrar fantasmas de las personas que

alguna vez habitaron ese mundo, dos de ellos decidieron quedarse

pues sabían que no soportarían el viaje de regreso a su propio

mundo, el resto fue más valiente y se aventuraron a buscar algún

mundo habitable cerca, era eso o desaparecer en la nada.

TERCER FINAL

Al cabo de un tiempo los fantasmas se cansaron de viajar, pues el

viaje era más largo de lo que esperaban, uno de ellos el mas joven

y valiente se decidió hablar con el más viejo.

-no podemos más este viaje es muy pesado, mire su alteza porque

no nos quedamos en ese planeta que está ahí, también es azul y

muy brillante como la tierra, pero solo está a unos cuantos años

luz de aquí.

El fantasma más viejo que también ya estaba cansado del viaje

decidió hacerle caso, con la mano le hizo una seña al resto de los

fantasmas para se desviaran del camino, así lo hicieron y al llegar

se llevaron una gran sorpresa, pues ese mundo era dominado por

monos y rápidamente descubrieron que eran más fáciles de

asustar que las personas de su propio mundo, todo era dicha y

felicidad para todos, así que el fantasma más viejo le pregunto al

resto que les parecía y todos sin excepción votaron por quedarse.


ENTRE NÚMEROS
A TI, PRINCESA
 

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